A veces se cree que es muy cuesta arriba ahorrar, pero lo cierto es que no es posible hacerlo si se consigue organizar tus finanzas personales. Con un poco de planificación y algo de orden en ciertos papeles, es muy posible ahorrar y no llegar tan ahogada a fin de mes.
Algo que se debe hacer es anotar en una hoja lo que se va a gastar a fin de mes y sacar los gastos fijos mensuales como luz, agua, hipoteca, etcétera, para luego añadir gastos variables como restaurantes, ropa, formación, etcétera. Una vez tengas esto, puedes clasificar como gastas el dinero y organizarte. Anotar todo en una libreta es una idea interesante.
Una opción estupenda es añadir un archivador con papeles, tickets, sobres, etcétera en tu hogar en el que se apunten las cifras asignadas en el mes con el fin de no pasarte del presupuesto para un gasto determinado.
Algo importante son las fundas de plástico para guardar facturas o presupuesto para algo en específico de la casa como un plan de decoración. Ahí se puede guardar lápices de colores o calculadora.
Algo valioso son los calendarios para anotar las fechas de los pagos a hacer con su modalidad especificada, es decir, una transferencia o pago de facturas.